Hola Guerrer@s!!
Mens Sana in Corpore Sano!!
Prácticamente ya ha terminado el periodo vacacional y, por tanto, el tiempo de presunta desconexión mental de la rutina y los excesos gastronómicos a los que invita el tiempo y el espacio en que hemos pasado estos días. Hay quien pide vacaciones para las vacaciones!! Así que vamos a envolvernos en esta famosa expresión latina y afrontar con ganas y energía todo el año que tenemos por delante…
Pero de dónde viene esta cita?
Apareció por primera vez en un texto de contenido religioso de Juvenal, un reconocido poeta latino. La obra de la que estamos hablando es “Las Sátiras” y pertenece al siglo I d.C. Para entender el contenido de “Las Sátiras” antes debemos conocer el contexto de la sociedad en la que se desarrolló. En el pueblo romano comenzaron a aflorar las raíces del cristianismo, siendo Juvenal uno de sus seguidores. Por tanto, tenemos una sociedad politeísta en la que la mayoría de la población rezan a todo tipo de dioses por cualquier cosa, habiendo una minoría (cristianos) que rezan a un solo Dios.
El objetivo de esta obra de Juvenal era, por un lado, ridiculizar con un lenguaje satírico el culto a muchos dioses; y por otro, cambiar la mentalidad en las oraciones, no se puede rezar por todo, sólo debemos rezar por las cosas realmente importantes.
Con la cita del “Mens Sana” podemos ver reflejado el segundo de estos objetivos, es decir, la cita completa es: “Orandum est ut sit mens sana in corpore sano” cuya traducción sería algo parecido a: “Uno sólo debe rezar por una mente sana en un cuerpo sano”.
Como podemos apreciar, no hay nexo de unión con el deporte ni con la actividad física, ni siquiera con la medicina o la psicología. El objetivo de Juvenal al escribir estas palabras no era otra que evitar que los “nuevos cristianos” rezaran por cualquier cosa, diciendo que sólo se debe rezar por las cosas realmente importantes, como poder disponer de salud mental y física.
Para dar el siguiente paso en la historia actual debemos trasladarnos a la Antigua Grecia. Famosa por ser la cuna de los Juegos Olímpicos Antiguos, además de diversas competiciones y juegos. Los deportistas fueron laureados, auténticos héroes en aquella sociedad, incluso comparados en diversos escritos con dioses y semidioses. Pero no toda la sociedad alababa las hazañas de los deportistas.
Había una corriente filosófica que se oponía el ejercicio físico y a este tipo de juegos y competiciones. Se cree que esta oposición era fruto de la envidia de despertaban los atletas en los filósofos, pues eran mucho más laureados e idolatrados que ellos, pero son suposiciones. Podemos decir que el comiendo de esta corriente está marcado por Aristóteles, y su idea de la separación entre el cuerpo y la mente (dualidad), defendiendo que ambos conceptos eran antitéticos, es decir, entrenar el cuerpo suponía un detrimento en el intelecto, y viceversa.