Hola Guerrer@s!!
Hoy os traemos a un personaje básico en Numanguerrix:
ESCIPIÓN, NUESTRO VILLANO FAVORITO!!!
Desde el punto de vista indígena, evidentemente no podía ser apreciado. Fue quien finalmente consiguió acabar con nuestra mítica Numancia a través de la calculada estrategia del cerco del que ya hemos hablado, evitándole más muerte y desgaste al ejército romano, allá donde otros habían atacado con toda su potencia militar y fracasado estrepitosamente. Da qué pensar incluso a día de hoy ¿verdad?
Por lo tanto, para Roma fue todo un héroe. Y, ciertamente, no es para menos.
En el año 151 a.C., después de varios desastres en Hispania, no se presentaron voluntarios para el reclutamiento de tropas que estaban realizando los cónsules. Entonces Emiliano se ofreció como voluntario para servir en el lugar que los cónsules consideraran conveniente; fue nombrado tribuno militar y acompañó al cónsul Licinio Lúculo a Hispania donde se distinguió por su coraje; mató a un cabecilla hispano en combate singular (como al comienzo de la película Troya, si recordáis, cuando Aquiles derrota a una mole de guerrero) e hizo un acto de valentía al ser el primero en trepar por los muros de la ciudad de Intercatia. Estas hazañas le hicieron ganar la admiración de los enemigos y la de sus compañeros.
En 149 a.C. se produjo el desembarco el asedio de Cartago, que tuvo que interrumpirse al año siguiente por razones logísticas. Escipión Emiliano actuó como tribuno militar, destacando por su inteligencia y capacidad militar, en contraste con la incompetencia de sus superiores. Por su valentía personal y habilitad militar pudo reparar, en gran medida, los errores, y la incapacidad del cónsul Manilio, cuyo ejército en una ocasión salvó de la destrucción. Sus habilidades le ganaron la confianza absoluta de Masinisa y de las tropas romanas, mientras que su fidelidad a su palabra lo hizo apreciado por el enemigo.
Esto hizo que el pueblo romano acuñara la creencia de que sólo un descendiente de Publio Cornelio Escipión el Africano (vencedor de Aníbal en la Batalla de Zama) podía vencer en Cartago, en una guerra que se les estaba haciendo demasiado larga a los romanos.Incluso personas de edad como Catón, que siempre estaba más dispuesto a la crítica que a la alabanza, elogió a Escipión con las palabras de Homero, “Sólo él tiene la sabiduría, el resto son sombras vacías”.
África se convirtió en provincia romana y Escipión Emiliano se volvió a Roma donde celebró un espléndido triunfo y el sobrenombre de “Africano” que había recibido por herencia le fue dado por derecho propio.